Otra vez Renée Fleming, esta vez con el Cordobés Marcelo Álvarez, en el último acto de Manon. A diferencia de lo que sucede en el libro del abate Prévost, y de la ópera de Puccini, la Manon de Massenet no llega a América, muere antes de partir, en Le Havre. ¡Pero qué dulce morir así!
Esta Manon es una opéra comique, pero eso no quiere decir una ópera cómica (aunque tenga algún rasgo de humor), sino que es una ópera que tiene partes habladas (la mayoría con acompañamiento orquestal). Es que ese era el estilo de las óperas cómicas en Francia, Alemania e Inglaterra, donde no había recitativos. Cuando en Francia se empezó a usar el mismo procedimiento en óperas serias el término desplazó su sentido... lo que siempre sucede con las lenguas, para felicidad de los poetas y desesperación de los lógicos.
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